Autoevaluación de ARQU4211- Historia de la Arquitectura I (Nerismar Monserrate Rodríguez)
Al finalizar el curso de historia de arquitectura, siento que he aprendido mucho sobre la arquitectura de la antigüedad. Gané mucho conocimiento sobre sus impactos culturales y arquitectónicos de diferentes sociedades. Me gustó trabajar las reflexiones de la clase, en especial poder presentarlo a mis compañeros, pero siento que el curso ARQU4211, con el profesor Juan Isado, puede mejorar para una mejor experiencia de aprendizaje.
Lo que más me gustó del curso fueron las reflexiones en estilo blog. Mediante las reflexiones realizadas durante el curso, pude en realidad entender lo que se habló en clase. Siento que gané mayor conocimiento de los edificios que ya conocía. También aprendí de edificios y ciudades que no había escuchado antes y sus impactos culturales, la importancia de sus elementos arquitectónicos, como la cúpula, y su búsqueda a la perfección en diferentes épocas y sociedades. Estas reflexiones permitieron una oportunidad de buscar más información sobre el tema, accediendo conocimiento fuera del salón de clases. Otra actividad que me encantó fue la presentación oral sobre edificios antigüos, como la Hagia Sophia, el Partenón, la Cúpula de la Roca y el Partenón, que son culturalmente y arquitectónicamente importantes en sus respectivos países y épocas. En este proyecto pude buscar más a fondo sobre la Hagia Sophia: sus transiciones religiosas y culturales durante la historia, su estructura ante los terremotos y la importancia de su cúpula. No solo aprendí información histórica sobre esta estructura, sino aprendí sobre métodos constructivos y estructurales para la creación de una gran cúpula y para combatir eventos sísmicos.
No obstante, una crítica que tengo sobre el curso es que se depende mucho de las reflexiones. Siento que lo que se habla en clase se queda en el salón por un día, resultando en tener que buscar referencias externas para poder entender y explicar mejor lo que vaya a escribir en la reflexión. Además, como cada clase toca un tema nuevo, no hay mucha oportunidad de discusión con el profesor sobre nuestros encuentros mientras hacemos las reflexiones. La clase por lo tanto termina siendo no más que una conferencia que se toma una vez a la semana. Al convertir una clase en estilo conferencia a uno más conversatorio, se pueden hablar de detalles que no necesariamente han sido discutidos en clases pasadas, abriendo más oportunidades de aprendizaje al curso.
A pesar de todo, siento que salí de la clase con un conocimiento más avanzado de lo esperado. Me siento más capaz de compartir información histórica sobre la arquitectura con los demás gracias a la clase. Recomendaría esta clase a los que les interesa escribir y hacer investigación adicional sobre la arquitectura antigüa, sus impactos sociales y culturales y sus aportaciones a la arquitectura.
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